Me gustan especialmente estas acuarelas del Almorchón; cómo con casi un solo color y el blanco del papel se puede conseguir tanto realismo. Gracias por mostrárnoslas.
Hola Joaquín, para mi es placer caminar despacio por el Almorchón, y suelo hacerlo a menudo. El silencio que habita aquel paraje, el sol del invierno, los aromas de la primavera que llenan el aire donde vuelan todavía rapaces solitarias. En fin, un placer para los sentidos que me otorgo cada vez que puedo. Gracias por tu visita, y un saludo.
Hola Alvaro, esto de pintar varias acuarelas del mismo tema es muy util, además, después de pintar setenta árboles estas siete del Almorchón me parecen pocas. Creo que pintaré dos o tres mas y listo. Gracias por tu visita.
Gracias Ruben, la verdad es que parece sencillo quitar cosas de la realidad y quedarte solo con lo esencial, pero ahí estoy, intentandolo todo los días. Tu sabes muy bien lo importante que es fotografiar solamente lo interesante, dejando fuera del encuadre lo inutil. Pues esto de la acuarela es lo mismo. Un abrazo.
Hola RosaMaría, es fácil emocionarse delante de esa mole de piedra silenciosa, y pintar su silueta disfrutando del sol en invierno. En verano es mejor cobijarse a la sombra. Un beso.
8 comentarios:
Me gustan especialmente estas acuarelas del Almorchón; cómo con casi un solo color y el blanco del papel se puede conseguir tanto realismo.
Gracias por mostrárnoslas.
Hola Joaquín, para mi es placer caminar despacio por el Almorchón, y suelo hacerlo a menudo. El silencio que habita aquel paraje, el sol del invierno, los aromas de la primavera que llenan el aire donde vuelan todavía rapaces solitarias. En fin, un placer para los sentidos que me otorgo cada vez que puedo.
Gracias por tu visita, y un saludo.
Hola José, veo que no paras con tus series de acuarelas, esta de el Almorchón, está muy bien, además no conocía esta montaña. Un abrazo
Hola Alvaro, esto de pintar varias acuarelas del mismo tema es muy util, además, después de pintar setenta árboles estas siete del Almorchón me parecen pocas. Creo que pintaré dos o tres mas y listo.
Gracias por tu visita.
Te felicito. Me encanta esta serie.
Gracias Ruben, la verdad es que parece sencillo quitar cosas de la realidad y quedarte solo con lo esencial, pero ahí estoy, intentandolo todo los días.
Tu sabes muy bien lo importante que es fotografiar solamente lo interesante, dejando fuera del encuadre lo inutil. Pues esto de la acuarela es lo mismo.
Un abrazo.
Transmites bien tus sensaciones y es una belleza apreciarlas. Saludos.
Hola RosaMaría, es fácil emocionarse delante de esa mole de piedra silenciosa, y pintar su silueta disfrutando del sol en invierno. En verano es mejor cobijarse a la sombra.
Un beso.
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