Cuando se trata de paisajes, a veces me interesa pintar
solamente la atmósfera de un sitio, sin importarme para nada los detalles,
otras veces los detalles son tan necesarios que los incluyo en el cuadro, como
estos dos ejemplos sobre “el Jarral” de Abarán, ambos cuadros recién pintados
para la serie “El Valle de Ricote”.