La primera
vez que me bañé en el mediterráneo fue en Mataró, en 1964, tendría yo cuatro
años más o menos. Y la segunda fue en Benidorm, cuando íbamos a pasar algún fin
de semana en casa de mis tíos; yo debía de tener entonces seis o siete años.
Ya de adulto,
el lugar que más he frecuentado para bañarme, ha sido la Manga del Mar Menor,
pero siempre en la parte del mar mayor.
No soy
marinero, pero si perfectamente mediterráneo, tanto en la dieta como en las
costumbres. Y por eso he pintado con frecuencia este mar azul y plácido.
Todas estas acuarelas son del mediterráneo murciano, y miden 15x28 cm. cada una.