Creo que lo importante de estos trabajos es atrapar la sensación que nos sobreviene al contemplar el olivo y trasladarla luego al papel. Los detalles concretos carecen ya de importancia.
Hola Froiliuba, más allá del acto pictórico, estos olivos tienen detrás muchas emociones para mi. Por eso los pinté. Gracias por el piropo de las puertas.
El olivo es el árbol sagrado del Mediterráneo. Su óleo consagra reyes de la Antigüedad, con él el samaritano cura las heridas del pobre viajero apaleado, al pie de un olivo sudó sangre Cristo... El olivo tiene algo de patriarcal, de anciano con artrosis en los nudos pero con inmensa sabiduría. Las hojas del olivo son de un velde polvoriento, casi gris, como la ceniza, como el cabello entreverado de canas. Pero tras la lluvia se torna el gris de la plata, esplendorosamente bello.Tú has pintado unos olivos casi cubiertos de boria, los vemos entre la neblina, con un halo de misterio envolvente que nos roba el anclaje de sus nudosas raíces en la tierra. Sólo importa el olivo. Un misticismo sublimado en arte magnifica la breve serie de estas acuarelas. A mí me subyugan con su poesía. ¡¡¡Magníficos olivos, magnífico artista, magnífica sensibilidad!!! Para mí, no les falta absolutamente nada, sino que piden, exigen más bien, una mirada que los complete, que los "sienta" como lo que son: una interpelación al espíritu, al alma.
Interesante trabajo sobre olivos, yo vivo rodeada de ellos, mi barrio está construido sobre un olivar y quedan olivos por las calles, en las rotondas e incluso tiene su parque. Tu has sabido reflejar la esencia de este árbol. Me gusta la tonalidad azulada con la que los trabajas, el juego de texturas y sobretodo como los aislas haciendo cada uno de ellos especial.
6 comentarios:
El olivo no es una de tus mejores obras, le falta algo, no se qué es, pero seguro que tú lo descubres.
Las puertas fabulosas, desprenden luz y sol.
Hola Froiliuba, más allá del acto pictórico, estos olivos tienen detrás muchas emociones para mi. Por eso los pinté.
Gracias por el piropo de las puertas.
El olivo es el árbol sagrado del Mediterráneo. Su óleo consagra reyes de la Antigüedad, con él el samaritano cura las heridas del pobre viajero apaleado, al pie de un olivo sudó sangre Cristo...
El olivo tiene algo de patriarcal, de anciano con artrosis en los nudos pero con inmensa sabiduría. Las hojas del olivo son de un velde polvoriento, casi gris, como la ceniza, como el cabello entreverado de canas. Pero tras la lluvia se torna el gris de la plata, esplendorosamente bello.Tú has pintado unos olivos casi cubiertos de boria, los vemos entre la neblina, con un halo de misterio envolvente que nos roba el anclaje de sus nudosas raíces en la tierra. Sólo importa el olivo. Un misticismo sublimado en arte magnifica la breve serie de estas acuarelas.
A mí me subyugan con su poesía.
¡¡¡Magníficos olivos, magnífico artista, magnífica sensibilidad!!!
Para mí, no les falta absolutamente nada, sino que piden, exigen más bien, una mirada que los complete, que los "sienta" como lo que son: una interpelación al espíritu, al alma.
Hola Rosa, gracias por llenar de literatura este rincón, sobre todo con palabras tan bellas.
Un abrazo.
Interesante trabajo sobre olivos, yo vivo rodeada de ellos, mi barrio está construido sobre un olivar y quedan olivos por las calles, en las rotondas e incluso tiene su parque.
Tu has sabido reflejar la esencia de este árbol. Me gusta la tonalidad azulada con la que los trabajas, el juego de texturas y sobretodo como los aislas haciendo cada uno de ellos especial.
Un saludo: Mª José
Hola María José, Cieza también es tierra de olivos y muchos de ellos son centenarios con unos troncos espectaculares.
Un abrazo.
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