Es una obsesión, lo reconozco, pero cuando veo una puerta vieja me hago muchas preguntas, y algunas de ellas las resuelvo plasticamente, como en este caso, pero otras quedan estancadas, en ese limbo imperfecto de las cosas que no tienen explicación.
Óleo sobre tabla
30x60cm.
6 comentarios:
Detrás de cualquier puerta vieja siempre hay mil historias. Me encanta esta acuarela. Una puerta y mil historias.
Muy interesante tu trabajo, buena explicación plástica.
A mi también me atrae ver reflejado el paso del tiempo en los objetos o en los seres vivos, detrás de cada uno existe una historia, una "vida" y sus imperfecciones, sus cicatrices, su deteriodo nos habla de ello con una belleza escondida, latente que tu sabes ver y plasmar.
Un abrazo: Mª José
Un trabajo excelente, José, con todo el misterio y la magia que te motiva a pintar estos temas.
Saludos
Gracias Conrado por tu visita. Ahora estoy preparando nueve cuadros sobre las puertas que dan acceso a la Mezquita de Cordoba. Ya veremos que sale.
Un abrazo.
Hola Maria Jose, un artista siempre debe tener entrenada la mirada, sobre todo para saber cuando estamos delante de algo interesante para pintar.
Un beso.
Hola Juan me alegro verte por aqui. Las puertas siempre me han parecido un buen tema para pintar, ya sean humildes o importantes.
Un abrazo.
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