lunes, 1 de junio de 2015

¿COPIAR O CREAR?

Cuando pinto, no tengo ningún interés en reproducir la realidad que tengo delante, siempre trato de ir más allá del aspecto exterior que tienen las cosas. No me interesa el virtuosismo técnico que solo busca copiar las cosas fotográficamente.

Puedo quedarme un paso antes de llegar al aspecto real del objeto, pintarlo de una manera esbozada, sintetizada, pero perfectamente reconocible. O puedo pintarlo un paso más allá de su aspecto real, rozando la abstracción, pero dejándolo reconocible aún. Son estos dos espacios que hay delante y detrás de la realidad, los que me interesan de verdad. Porque ahí, creo yo, está la verdadera creación. 


óleo cobre lienzo/30x20 cm.

óleo sobre lienzo/30x20 cm.

óleo sobre lienzo/50x120 cm. (detalle)

martes, 26 de mayo de 2015

LA FIGURA HUMANA

Todos los pintores, tarde o temprano, tienen que enfrentarse algún día a la figura humana. Yo lo hice al principio, cuando estaba estudiando en la Academia del pintor Juan Solano, en Cieza (Murcia).
Comencé dibujando con carboncillo figuras sueltas de escayola, un ojo, una boca, la nariz, una oreja y finalmente la cara entera del Séneca.
Luego seguí dibujando una mano, un pie, y al final no tuve más remedio que dibujar la Venus de Milo a tamaño natural. Y el discóbolo de Mirón, por supuesto.
Todo este proceso era el que había que seguir para aprender a dibujar el cuerpo humano.

Más tarde, por mi cuenta, seguí aprendiendo a dibujar la figura humana, y con libros de arte, aprendía a dibujar su esqueleto y sus músculos, hasta ser capaz de entender que hay debajo de un ser humano.


Esta manera de aprender a pintar el cuerpo humano, me permite mirarlo desde muchos puntos de vista, y elegir desde cual quiero pintarlo. Porque no solo la realidad fotográfica puede aportar exactitud a un buen retrato, también puede hacerse desde la ensoñación, la memoria o el sentimiento.





Mi madre, tempera y lápiz sobre papel.

domingo, 17 de mayo de 2015

LA ESPAÑA DE AHORA

Estamos en tiempos de elecciones y todos los lobos han salido a cazar. Pero no podemos huir, las condiciones ya están impuestas, y solo nos queda callar o gritar cuando nos claven los colmillos.
Los políticos que nos han gobernado hasta hoy, nos han abandonado, y ahora ocupan los mejores despachos de las mejores empresas, y es que somos un puñado de perdedores flotando encima de un iceberg de corrupción.
Me avergüenza pensar la España que le vamos a dejar a nuestros hijos y nietos, porque ellos, sin tener la culpa, tendrán que pagar nuestros platos rotos.
Y mientras tanto, los que ya estamos cargados de años, tendremos que retirarnos de la arena, con la dignidad bastante mermada, gracias al saqueo de los políticos, que sabiamente nos han gobernado.

Tantos años deseando entrar en el club (Europa) y ahora estamos sirviendo las copas que se beben los demás. Me duele mucho esta España del Nodo, que ya no le hace gracia a nadie.



"mi madre" tempera sobre papel

jueves, 7 de mayo de 2015

LA ESENCIA DE LA PINTURA

Siempre existe un punto de inflexión en la carrera de un pintor, y es cuando deja de copiar y empieza a crear. Es un paso decisivo, porque es cuando tiene que demostrarse a sí mismo, o a los demás, que es un pintor de verdad y no un simple copista.
Copiar un cuadro es un atajo, una especie de trampa, donde el pintor no se esfuerza en componer, ni en sintetizar, ni en crear nada, porque ese trabajo ya está hecho en el cuadro que está copiando.

Un pintor de verdad tiene que enfrentarse a la naturaleza él solo, sin trampas, sin atajos, con sus conocimientos, y tiene que crear mentalmente el cuadro antes de que exista físicamente, y será él quien extraiga de la naturaleza los elementos que quiere incluir en el cuadro, y eliminando el resto. Es un trabajo de síntesis. Es cuando aparece la pintura en todo su valor. Nada de esto ocurre cuando se copia un cuadro.

Álamos del río Segura

Valle de Ricote

El Almorchón 

Huerta con la Atalaya al fondo

Huerta con limoneros 

Orilla del río Segura I

Orilla del río segura II

Arrozales de Calasparra (Murcia)

La arboleda perdida

El río Deva (Asturias)

(Todos estos cuadros son de mi colección personal, pintados entre 1994 y 1.999)